Gracias al repunte global de precios de la soja y a una campaña 2025/26 con mejores rindes en maíz y trigo, el complejo agropecuario argentino prevé incrementar su valor bruto de producción en unos USD 4.000 millones, impulsando la generación de divisas del país.
Agro29 de noviembre de 2025
Matías C. E. Torres
Según un artículo del Periodista Mariano Zalazar para INFOBAE, el sector agroindustrial recupera impulso como motor clave de divisas gracias a un escenario internacional favorable. Un informe de la consultora LCG estima que —pese a una leve retracción en volumen de la cosecha de soja respecto del ciclo pasado— el fuerte aumento del precio internacional (la soja pasó de promediar USD 390 a USD 420 por tonelada) logra compensar con creces. Además, el valor total de la producción de soja se incrementaría en USD 1.400 millones solamente por efecto precio.
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A su vez, los cereales no quedan atrás: maíz y trigo también proyectan rindes y producciones superiores para 2025/26, gracias a un aumento de superficie sembrada y mejores condiciones de cultivo. Con cotizaciones internacionales relativamente firmes, esto eleva significativamente su valor bruto de producción, sumando al panorama general de optimismo agroexportador.
Para regiones como el Departamento Belgrano este contexto representa una ventana de oportunidad concreta: aún con menor volumen en algunos cultivos, los ingresos totales pueden mejorar sensiblemente. Pero ojo: este “viento a favor” depende del clima, del contexto internacional, de los costos internos y de la logística; factores que ya vienen complicando desde hace tiempo. Por eso, para muchos productores puede ser momento de definir estrategias: ¿vender ahora con buen precio? ¿retener esperando mejores cotizaciones en 2026? Esa decisión puede marcar la diferencia.
(AUDIO) Un nuevo informe de FADA revela que más de 1,2 millones de mujeres trabajan hoy en la agroindustria argentina, representando el 28% del empleo total del sector. En los últimos cinco años se sumaron casi 228 mil trabajadoras, con fuerte protagonismo entre las menores de 30 años.
El Índice de Actividad de la Cadena Agropecuaria (IACA-BCR) mostró un aumento interanual del 4% en octubre, aunque registró una leve caída mensual del 0,2%. El freno se explica por la menor dinámica en cultivos y biocombustibles, mientras que la agroexportación siguió creciendo.
La Guía Estratégica para el Agro de la Bolsa de Comercio de Rosario advirtió que la siembra de soja de primera en la Región Núcleo viene muy demorada: todavía falta implantar alrededor de 1 millón de hectáreas, con lluvias casi permanentes que complican el avance justo cuando se cierra la ventana óptima y crece el riesgo de tener que resembrar.
Con apenas el 20% del área cosechada, el trigo ya aporta 4 millones de toneladas y promete una campaña de 24 millones. En el centro-norte de Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y la zona núcleo se registran rindes que superan los máximos históricos y contagian entusiasmo de cara a la gruesa.
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Gracias al repunte global de precios de la soja y a una campaña 2025/26 con mejores rindes en maíz y trigo, el complejo agropecuario argentino prevé incrementar su valor bruto de producción en unos USD 4.000 millones, impulsando la generación de divisas del país.